viernes, 23 de mayo de 2008

Clarita in the sky with diamonds

"Equidistantes de los átomos y de las estrellas, estamos extendiendo nuestros horizontes exploratorios para abarcar tanto lo muy pequeño como lo muy grande."




Anoche clarita me dice:" Mami, tengo una duda; pero no se decirla, asi que la voy a dibujar"




Duda de Clarita:
¿Y yo tenía que responder a semejante duda, sin descuidar, por supuesto, la preparación de la cena, el estudio con su hermana, el telefono sonando, etc...?


¡Ohhh! Y ahora, quien podra defenderme!?



¿.........podra.........?



" Nos movemos en nuestro ambiente diario sin entender casi nada acerca del mundo. Dedicamos poco tiempo a pensar en el mecanismo que genera la luz solar que hace posible la vida, en la gravedad que nos ata a la Tierra y que de otra forma mnos lanzaría al espacio, o en los átomos de los que estamos constituidos y de cuya estabilidad dependemos de manera fundamental. Excepto los niños (que o saben lo suficiente como para no preguntar las cuestiones importantes), pocos de nosotros dedicamos tiempoa preguntarnos por qué la naturaleza es de la forma que es, de dónde surgió el cosmos, o si siempre estuvo aquí, si el tiempo correra en sentido contrario algún día y los efectos precederán a las causas, o si existen límites fundamentales acerca de lo que los humanos pueden saber. Hay incluso niños, y yo he conocido alguno, que quieren saber a que se parece un agujero negro, o cúal es el trozo más pequeño de la materia, o por qué recordamos el pasado y no el futuro, o cómo es que, si hubo caos antes, existe, aparentemente, orden hoy,y, en defiitiva, por qué hay un universo."


Eterno desencuentro
La Iglesia condenó a Galileo en el siglo XVII por defender la teoría heliocéntrica de Copérnico , que establecía que la Tierra y los demás planetas giraban en torno a un Sol estacionario, mientras que la doctrina de la Iglesia defendía que la Tierra era el centro del Universo.
Sin embargo, en 1992 el Papa Juan Pablo II firmó una declaración en la que reconocía que la Iglesia se equivocó al acusar a Galileo, y que todo fue un error motivado por una "trágica y mutua incomprensión".


Conclusión de Clarita a la teoria heliocentrica:

"Es como si hubiera un monton de conejos que tienen frio, y estan en el cielo. Y tambien hay una estufa prendida que vuela por el cielo; y los conejos vuelan alrededor de ella para calentarse..."

Si Clarita. Algo asi. ¿Le preguntamos al Papa?

1 comentario:

Lucia Olazabal dijo...

¡¡¡Clarita!!! Casi siempre me cae mal, pero me dio terura leer eso. Conejitos y estufas, que teoría...

Ana.